Navegar en Internet y tener contacto directo con las nuevas tecnologías la mayor parte del día son actividades que hacen parte de la cotidianidad de la actual generación de adolescentes, la ‘Generación Y’.
Esto ha sido resultado de una sociedad que ha evolucionado a pasos agigantados en los últimos años, y que gracias a la cultura de consumo y adaptación que existe, ha llegado a no concebir la vida sin el uso de las herramientas cibernéticas.
El uso de buscadores globales, redes sociales, chats, correos electrónicos, compras en línea y hasta juegos que permiten apostar de manera real, son ahora parte de las actividades que día a día realizan los jóvenes, y que lejos de significar un problema para todas sus tareas cotidianas, se han convertido en una herramienta eficaz y de fácil uso para ellos.
No obstante, no todo lo que representa Internet es bueno para los adolescentes, el uso sin límites de la red y el acceso a la multiplicidad de contenidos que ofrece sin la asesoría adecuada pueden ser perjudiciales para el joven usuario, pero ese no es el único problema para los padres de la generación Y.
Porque la tecnología no es lo único que acompaña esta evolución sino también las adicciones cada vez son más los jóvenes que incurren a ellas.
La historia de las adicciones va unida a la historia del hombre, es decir no es algo propio de está generación, debido que fumar cigarrillos, beber alcohol, mascar hojas de coca, esnifar preparados psicoactivos, beber pócimas, fumar marihuana, utilizar el opio para el dolor, etc., son ejemplos bien conocidos de algunas de las sustancias que el hombre la utilizado a lo largo de la historia o sigue utilizando.
Más actualmente, junto a las anteriores, y sus derivados industriales o químicos, destacan las nuevas adicciones, unas derivadas de sustancias, como es el caso de la heroína, la cocaína, las drogas de diseño, el LSD, entre las más importantes, y otras adicciones comportamentales, sin sustancia, como resultado de nuestra sociedad tecnológica, como la adicción a Internet, al juego de azar, al teléfono móvil, a los teléfonos eróticos, al sexo, a las compras, y a un amplio etcétera de conductas que pueden llegar a ser adictivas.
Por ello, en los últimos años se incluyen distintas conductas bajo la denominación genérica de adicciones o conductas adictivas. Basadas inicialmente en el concepto de dependencia (física y psíquica), y evolucionando a partir del mismo, se aplicaban inicialmente a sustancias psicoactivas que ingeridas por un individuo tenían la potencialidad de producir dependencia. Con el transcurrir de los años se observó que también existían conductas, que sin haber sustancia de por medio, tenían la capacidad de producir dependencia y el resto de las características que tenían las dependencias a las sustancias psicoactivas.
Lo grave del tema es que en algunos círculos sociales donde los jóvenes se reúnen se juntan a utilizar estas drogas o se incentivan para seguir estas conductas adictivas.
Algunas de las sustancias más utilizadas son:
• La cocaína (poderoso estimulante del sistema nervioso central)
• Anfetaminas (sustancias que actúan como un fuerte estimulante del sistema nervioso). Éxtasis (estimulante, alucinógeno, euforia)
• Efedrina (hierba conocida en la china desde hace cientos de años, es clasificada como una droga que actúa como estimulante del sistema nervioso central)
• Cannabis sativa (marihuana)
• Inhalantes (vapores químicos que se respiran y producen efectos psicoactivos)
• Pasta base de cocaína (PBC es la cocaína no tratada, que se extrae de las hojas del arbusto de la coca a través de un proceso de maceración y mezcla con solventes como parafina, bencina y ácido sulfúrico, produce euforia y alucinaciones)
• Tabaco (a través del humo, se incorporan los distintos elementos contenidos en el tabaco, provocando efectos nocivos en fibroblastos, células sanguineas e inflamatorias, en el sistema inmunitario celular y humoral)
• Alcohol (consumo excesivo de alcohol de forma prolongada con dependencia del mismo).
Como comentaba antes los chicos de hoy se juntan para utilizarlas como las llamadas previas, a veces en la salida del colegio se juntan en una esquina a fumar, y digamos que aunque no siempre pasa el que no fuma o no toma se siente afuera del grupo.
Muchos han intentado tomar medidas, como charlas en el colegio, prohibición, etc… pero este movimiento sigue tomando fuerza y cada vez a mas temprana edad, la cuestión es como vamos a formar a estos jóvenes para no caer en estas tentaciones, creo que lo mas importante es una buena comunicación familiar, fortalecer la confianza y mantener informado a estos jóvenes como primeras medidas.
Bueno me despido con mi último posteo, espero que les haya gustado.